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Vivir en extensas áreas verdes tiene beneficios para toda tu familia, especialmente cuando se trata de su salud. De acuerdo con el Journal of the American Heart Association, vivir en zonas verdes te puede proteger de padecer una enfermedad cardiovascular y cerebrovascular. Según sus conclusiones, se debe gracias a un menor nivel de estrés y una mayor capacidad para reestructurar vasos sanguíneos.

Asimismo, es esencial vivir en este tipo de áreas para obtener una salud mental óptima; hay una serie de estudios que afirman que quienes han cambiado su hogar por uno más cerca de la naturaleza, sus niveles de estrés, depresión y ansiedad han reducido considerablemente. Por ejemplo, un estudio de la Universidad de Chiba, en Japón, afirmó que disminuían los niveles de adrenalina, noradrenalina (hormona que aumenta la presión arterial) y cortisol (hormona de estrés) en personas que salían a caminar entre áreas verdes abundantes.

En los pequeños también tiene grandes pros; según la organización Children and Nature, el que un infante juegue entre la naturaleza ayuda al desarrollo de sus habilidades creativas, además de mejorar su capacidad para solucionar problemas y potencializar distintos tipos de inteligencia. Precisamente por lo anterior es que nació nuestro Wet Park, un lugar perfecto para que los menores se refresquen y jueguen entre árboles y plantas.

Otra cosa que hay que tener bien presente cuando hablamos de vivir entre áreas verdes es el beneficio que le da a nuestros pulmones, especialmente cuando hacemos ejercicio, ya que cuando hacemos una actividad deportiva inhalamos una mayor cantidad de oxígeno, por lo que, si entrenamos en áreas con altas concentraciones de contaminación, mayores niveles de sustancias nocivas enteran a nuestro sistema respiratorio.

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